Nos estamos quedando sin tiempo para apreciar a LeBron James

En la larga y legendaria historia de la rivalidad de Los Ángeles Lakers con los Boston Celtics, ha habido muchas derrotas de Los Ángeles más difíciles de asimilar para los Lakers que la derrota del sábado por 111-101.

Pero eso no hace que el final de una racha de ocho victorias consecutivas, marcada por la salida de LeBron James debido a una lesión en la ingle , sea más fácil para Los Ángeles.

Dave McMenamin de ESPN informó que "es demasiado pronto para proyectar un cronograma preciso", aunque agregó que una fuente sugirió que James podría enfrentar una ausencia de semanas.

No importa el resto de una gira de cuatro juegos que comenzó con la derrota del sábado y envía a los Lakers a enfrentar a los otros aspirantes a las Finales Milwaukee y Denver; las "semanas" en este momento de la temporada podrían extenderse hasta los playoffs.

Aunque Luka Dončić se ha adaptado y ha recuperado su nivel de MVP desde que llegó en un canje desde Dallas, Los Ángeles sigue siendo un equipo que depende de James tanto como de su nueva superestrella. Entre los aspirantes al campeonato a poco más de un mes de que comience la postemporada, los Lakers podrían ser los que más dependen de dos superestrellas principales.

Antes de que James abandonara el partido del sábado, esa confianza era irónicamente evidente; irónica porque, mientras Jayson Tatum y Jaylen Brown se combinaron para 71 puntos de los Celtics, el juego de Derrick White resaltó cierto factor X que Los Ángeles puede no tener de manera consistente en su estado actual.

White anotó 10 puntos, repartió siete pases, capturó cinco rebotes, robó un balón y bloqueó un balón, y terminó con una valoración de más-menos de más-17, la más alta del partido. Los Ángeles tiene una tercera opción de anotación efectiva en el perímetro en Austin Reaves, pero un jugador que haga de todo puede ser una cualidad clave que falta en esta alineación de los Lakers.

Por supuesto, las piezas complementarias son irrelevantes si James no está en su mejor estado físico o cerca de él. Y a los 40 años, es natural preguntarse con cuánta más eficacia podrá James seguir recuperándose cerca de su mejor estado físico previo a la lesión.

James ha sido en gran medida una maravilla sin edad en las últimas etapas de su carrera. La leyenda de los Lakers, Kareem Abdul-Jabbar, que estuvo en el lado perdedor de algunas de las desgarradoras derrotas mencionadas anteriormente ante los Celtics, pero también responsable de hacer que la piel de los fanáticos de Boston se pusiera tan verde como los uniformes de su equipo en muchas ocasiones, había sido el punto de referencia anterior para la longevidad.

Sin embargo, aunque El Capitán siguió siendo una figura clave en las finales de los Lakers a fines de la década de 1980, Magic Johnson claramente había tomado las riendas como la fuerza impulsora del equipo. Dončić es una estrella comparable a Magic tanto en estilo como en habilidad, pero muy similar al mayor James.

El juego de James, que desafía al Padre Tiempo, nunca fue más evidente que en los días previos a esta visita a Boston. En medio de la racha ganadora de los Lakers, James se convirtió en el primer jugador de la NBA con 50.000 puntos. Luego, en la derrota del sábado, se fue al vestuario a una asistencia de lograr su 152º triple-doble de carrera: 22 puntos, 14 rebotes y nueve asistencias.

En ese sentido, hay un paralelo quizás extraño y ciertamente desafortunado que se puede trazar con otra leyenda de los Lakers, Kobe Bryant. Bryant, acercándose al final de su temporada número 17, estaba en la carrera por el MVP y era tercero en la NBA en anotaciones cuando anotó 34 puntos en una victoria en abril sobre Golden State.

Bryant también se rompió el tendón de Aquiles en ese juego, y el máximo anotador de todos los tiempos en la historia de los Lakers nunca fue el mismo durante el resto de su carrera.

La buena noticia en el caso de James es que incluso la posibilidad menos optimista de una ausencia de semanas , como sugirió ESPN, es significativamente menos dañina a largo plazo que una lesión de Aquiles como la que sufrió Bryant.

Lo preocupante de la lesión de James, tanto para los Lakers como para los fanáticos de la NBA en general, es que es un duro recordatorio de que el tiempo que nos queda para disfrutar de la que posiblemente sea la mejor, y ciertamente la más duradera, carrera en la historia de la liga es limitado.